El repunte en el flujo de personas migrantes procedentes de Venezuela para buscar asilo en Estados Unidos representa un desafío debido para ellos no aplica la expulsión inmediata a México bajo Título 42, situación provoca "cuello de botella" en albergues paseños.
Por Verónica Martínez
Ciudad Juárez, 17 de septiembre (SinEmbargo).– El incremento significativo del flujo de migrantes, en su mayoría venezolanos, que cruzan a Estados Unidos para pedir asilo ha saturado los espacios de acogida de El Paso y representa un desafío para autoridades migratorias en El Paso, Texas, debido a que la situación sobrecarga su capacidad de atención diaria.
Por el río Bravo, cientos de personas se han ingresado de manera masiva en los últimos días a territorio estadounidense. Quienes logran cruzar son liberados en las calles de El Paso, no son expulsados a México porque en su mayoría no entran bajo el Título 42. Sin la aplicación de esa orden de salud pública, las personas tienen derecho a solicitar asilo después de cruzar la frontera y permanecer en el país mientras los tribunales de inmigración deciden su estatus.
Esta emergencia migratoria registrada en los últimos días se concreta ahora en la ciudad de El Paso, señalaron organizaciones en Ciudad Juárez, donde la mayoría de los migrantes venezolanos están de paso.
“Lo que vemos ahora es que están más bien de paso y la atención es muy distinta” dijo Cristina Coronado, coordinadora de la Oficina de Movilidad Humana de la Diócesis de Ciudad Juárez, donde la atención a venezolanos ha sido mínima, aunque cientos han cruzado en la última semana.
Las pocas personas que han llegado a las oficinas que se ubican en la Catedral, expresaron haber salido de Venezuela por la grave situación económica del país y por la represión que viven por parte del estado.
“Otra cosa que también hemos visto es que los venezolanos no tienen familia en Estados Unidos como la mayoría de los centroamericanos”, dijo Coronado. “Por eso es una crisis tremenda la que están pasando en El Paso al estar varados”.
Rodolfo Rubio Salas, investigador en el tema de migración del Colegio de Chihuahua y miembro del Grupo Interdisciplinario en Temas Migratorios, considera que podríamos estar viendo una nueva etapa en el fenómeno migratorio en la región y que el flujo de personas migrantes de Venezuela continuará por un periodo indeterminado.
“México juega digamos como tercer país en ese proceso de solicitud de asilo. Cuando todas esas características cambian, tanto los albergues como los centros de atención se tienen que adaptar a las nuevas circunstancias”, dijo.
Eso ocurre ahora, aunque la situación sobrecarga a la comunidad de El Paso, Texas, donde cientos son procesados en el bordo del río Bravo, mientras otros se concentran en la zona centro, en casas de campaña, sillas o colchones donados debido a que los albergues están saturados.
El sector de El Paso ha visto un promedio de 660 procesamientos diarios de personas venezolanas desde el 8 de septiembre, dijeron autoridades de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés).
La autoridad migratoria también reporta un aumento en los encuentros con personas en movilidad con un promedio de mil 300 diarios desde que inició el mes de septiembre. Este aumento se está dando especialmente con migrantes que no entran bajo el Título 42.
Aunque la mayoría son de origen venezolano, autoridades de la Patrulla Fronteriza aseguran que también se reportan encuentros con personas de otras nacionalidades.
El aumento en el número de migrantes que cruzan la frontera registrados en los últimos días obligó a funcionarios de CBP instalaron un centro de procesamiento improvisado debajo del puente para ayudar a mover a los inmigrantes que crucen el Río Bravo desde Ciudad Juárez.
Reportes mensuales de la CBP muestran que el mes con mayor registro de encuentros del 2022 fue mayo con 36 mil 302 y un promedio de mil 210 encuentros diarios.
Las cifras muestran que mientras los encuentros con la Patrulla Fronteriza en los meses de junio y julio permanecieron por debajo de los 27 mil, el total de encuentros en la Oficina de Operaciones de campo han ido en aumento llegando a los mil 994 solo en el mes de julio.
AL TOPE DE CAPACIDAD DAN SALIDAS PROVISIONALES
Las personas que no son expulsadas bajo el Título 42 llevan un proceso de revisión con autoridades de CBP en el Centro de Procesamiento del Sector de El Paso. Cuando este se encuentra ya rebasado en capacidad, se considera dar salidas provisionales de las personas detenidas.
Las personas son liberadas cerca de albergues comunitarios, albergues para personas en situación de calle y estaciones de autobús, explicaron autoridades de CBP en un comunicado oficial.
“Si las organizaciones no gubernamentales están rebasadas en su capacidad, la Patrulla Fronteriza se coordina con los gobiernos locales y ciudades para identificar ubicaciones en las que los migrantes podrán acceder a servicios de transporte o alojamiento”, declararon por correo electrónico.
Del 8 de septiembre al pasado martes, se dieron mil 131 salidas provisionales, reportó la Patrulla Fronteriza del sector de El Paso.
La Oficina para el Manejo de Emergencia de El Paso (OEM por sus siglas en inglés) ha estado trabajado en coordinación con organizaciones sin fines de lucro y la comunidad para dar atención y acogida a personas migrantes, expresó Laura Acosta, vocera del municipio.
El albergue Opportunity Center ubicado en el vecindario histórico Magoffin, ha fungido como un centro de bienvenida, reportan medios de El Paso. Ahi se ha proveído de comida, agua, servicios de salud básicos, de comunicación y se atienden las necesidades de alojamiento y transporte.
Las personas en situación de movilidad que dejan la ciudad de El Paso lo hacen en autobús o de forma aérea tomando vuelos desde al aeropuerto de El Paso.
La autoridad municipal informó que la OEM ha financiado 28 paquetes de viajes en autobús dirigidos a Nueva York desde el 23 de agosto y se han gastado más de 600 mil dólares en transporte. Los gastos serán cubiertos por fondos brindados por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, señaló Acosta.
El pasado miércoles, autoridades de CBP y la Patrulla Fronteriza se reunieron con fuerzas de seguridad y autoridades de la comunidad para discutir estrategias de atención a migrantes en el centro de El Paso, señalo la jefa de la patrulla, Gloria I. Chávez.
HAPPENING NOW-a unified command meeting is in motion to discuss the increase in migrants in downtown El Paso. Building our alliance with community stakeholders and law enforcement leaders is critical. We will continue to inform on the current influx and how this will be managed. pic.twitter.com/M3E8FYJ70H
— Gloria I. Chavez (@USBPChiefEPT) September 14, 2022
UN CAMBIO EN LA DINÁMICA MIGRATORIA EN JUÁREZ
La llegada de venezolanos en tránsito por Ciudad Juárez siempre ha existido, dijo Rodolfo Rubio Salas, investigador en el tema de migración.
Aunque considera que este flujo no se había presentado de la manera tan significativa como ha sido en las últimas semanas y en gran parte se debe a los cambios en políticas migratorias de Estados Unidos, dijo el académico, y la extensión del programa de protección y el fin del programa ‘Quédate en México’ son eventos que han motivado la migración.
“Las personas que están con el potencial de salir de un lugar de origen están esperando noticias acerca de si las condiciones mejoran para poder tomar la decisión ya definitiva de salir de estos países. Entonces la información está fluyendo rápidamente y se están dando cuenta en el sur”, dijo Rubio.
Desde el 2018, Ciudad Juárez ha visto un flujo significativo de personas en movilidad provenientes de Centroamérica y el Caribe, pero sus estancias llegaban a ser de mediano plazo ya que muchos quedaban varados al no poder cruzar o esperando la resolución de sus casos migratorios.
Rubio considera que podríamos estar viendo una nueva etapa en el fenómeno migratorio y que el flujo de personas migrantes de Venezuela continuará por un periodo indeterminado.
En esto coincide Cristina Coronado, de la Oficina de Movilidad Humana de la Diócesis de Ciudad Juárez, a donde los pocos venezolanos que llegan en busca de ayuda presentan altos niveles de ansiedad y temor.
Las personas en movilidad venezolanas expresaron venir impulsadas por el fin del Protocolo de Protección a Migrantes y la extensión del programa de Estatus Protección Temporal (TPS por sus siglas en inglés) que aplica para venezolanos, protegiéndolos de deportaciones.
“Al no haber MPP, pues ellos creen que no van a ser regresados para acá. Además, el Titulo 42 últimamente está aplicando nada más a los centroamericanos, entonces entre ellos se corre la voz”, dijo Coronado.
El 11 de julio, el Secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas anunció la extensión de TPS para personas venezolanas vigente hasta el 10 de marzo del 2024. La extensión entró en vigor el pasado 10 de septiembre.